¿Has escuchado sobre la Coatlicue? La deidad que los mexicas y los aztecas adoraban, la consideraban la “Diosa Madre de todos los Dioses”, una figura poderosa y misteriosa.
Una diosa con una presencia imponente, cráneos, serpientes, garras y fauces representando la dualidad de la vida y la muerte, la conexión entre la tierra y el cielo.
Su nombre, Coatlicue, significa “La de la falda de serpientes” en náhuatl. Una diosa rodeada de enigmas que se cree fue tallada en el año 1500 dc.
Por su imagen “perturbadora” los conquistadores españoles mandaron a enterrarla en el seno de la Plaza Mayor de la Nueva España y ahi permaneció oculta por siglos.
Historia de Coatlicue madre de Huitzilopochtli
La historia de Coatlicue comienza con su matrimonio con Mixcóatl, el dios de la caza y el cielo nocturno. Juntos, tuvieron varios hijos, incluyendo a la diosa Coyolxauhqui, que gobernaba sobre sus hermanos.
Un día, Coatlicue, ya viuda, estaba barriendo en el cerro de Coatepec, cuando de repente, un hermoso plumaje cae a sus pies.
Lo guarda en su seno, pero al buscarlo más tarde, descubre que está embarazada. Y no de cualquier hijo, sino del futuro dios Huitzilopochtli, el dios de la guerra y el sol.
Cuando Coyolxauhqui se entera de la situación, se siente deshonrada y convence a sus hermanos para que maten a su madre.
Pero, ¡sorpresa! Es demasiado tarde, porque en ese mismo instante, Huitzilopochtli nace como un guerrero valiente y armado.
Huitzilopochtli defiende a su madre y lucha contra sus hermanos. Los primeros hijos de Coatlicue son sacrificados y se convierten en estrellas.
La cabeza de Coyolxauhqui es cortada y se convierte en la luna, mientras que el resto de su cuerpo rueda por el cerro.
Templo Mayor
Este hecho tiene una conexión profunda con el Templo Mayor, que fue construido inspirado en aquel cerro de Coatepec.
En ese templo, los cuerpos de los sacrificios humanos eran arrojados hacia abajo, replicando la historia de Coatlicue.
Imagínate ahora una figura monumental encontrada en la Plaza Mayor de la Ciudad de México en 1790.
Esta escultura muestra la historia de Coatlicue de una manera impresionante. Los senos de la diosa simbolizan su papel como madre que amamantó a los dioses.
Pero aquí viene lo interesante: la falta de cabeza, reemplazada por dos serpientes.
Las garras en lugar de manos y pies representan los sacrificios humanos. Incluso el collar de la diosa está hecho de corazones y manos, con un cráneo en el centro.
Por eso, a veces se le llama “la comedora de inmundicias”.
¡Y eso no es todo! La figura de Coatlicue ha inspirado a muchos artistas a lo largo del tiempo.
Diego Rivera, José Clemente Orozco, Saturnino Hernán y Miguel Covarrubias, solo por nombrar algunos, crearon obras de arte basadas en esta poderosa deidad.
¿Dónde admirar a Coatlicue?
Entonces, si alguna vez visitas el Museo de la Ciudad de México o el Museo de Antropología e Historia de la Ciudad de México, no te pierdas la oportunidad de admirar la imponente escultura de Coatlicue.
Mide 3.5 metros de alto y 1.5 metros de ancho, y te sumergirá en la historia y la cultura de nuestros antepasados.
Imagínate recorrer el museo, rodeado de tesoros ancestrales, mientras te maravillas con la representación de Coatlicue y su poderoso simbolismo.
Puedes ver cómo los pintores Diego Rivera, José Clemente Orozco y otros han plasmado la figura de esta deidad en murales y obras de arte que han perdurado en el tiempo.
Así que no te lo pierdas, visita el Museo de la Ciudad de México o el Museo de Antropología e Historia y adéntrate en el legado de Coatlicue.
Descubre la historia de una diosa que encarna la dualidad de la vida y la muerte, la fertilidad y la muerte, y que ha dejado una huella imborrable en nuestra cultura.
¿No te parece fascinante? Coatlicue, una deidad legendaria que sigue cautivando y aterrorizando a todos aquellos que se adentran en su historia y simbolismo.
Significado simbólico de su falda de serpientes
La falda de serpientes que lleva Coatlicue tiene una gran importancia simbólica. Esta falda es un símbolo de fertilidad y abundancia y también representa los ciclos de vida y muerte.
Las serpientes que componen la falda son una representación del poder de la naturaleza y la importancia vital de la tierra para la vida.
Además, también se cree que las serpientes son un vínculo entre el mundo humano y el mundo de los dioses.
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Asociaciones de Coatlicue con la fertilidad, la guerra, el gobierno y la agricultura
Coatlicue es una deidad multifacética, y está asociada con muchos aspectos importantes de la vida en la mitología azteca.
En la mitología, su asociación con la fertilidad se debe a que es la diosa madre, y es gracias a ella que las plantas y los animales crecen y se multiplican.
Además, su relación con la guerra se debe a que es la protectora de la ciudad de Tenochtitlán y se cree que protegió a los combatientes aztecas durante las batallas.
En lo que respecta al gobierno, se asocia con la política azteca, ya que se creía que era la madre de los gobernantes.
Por último, en cuanto a la agricultura, se cree que Coatlicue fue una de las principales diosas que enseñó a los aztecas a cultivar los cultivos que necesitaban.
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